Suponía cosas, siempre lo hice, pero en mis suposiciones nunca apareciste, ¿Eso quiere decir que eras real? ahora que te veo con mis propios ojos y que no eres producto de un pensamiento, empiezo a creer que eres una suposición y que en verdad no existes, lo extraño de todo ésto es que tu masa se hace palpable y tus vísceras huecas, lo sublime de ésto es que tu sangre aún está fresca.
Lo maravilloso que has sido al presentarte ante mi aquella lúgubre temporada de sexo, drogas y alcohol, eso no ha hecho más que jamás alejarte de mi sumiso pensar, nos podido nunca igualar el sentimiento de perfección que me llevó a la locura, pero al menos te has encargado de elevarme al sexto sentido de disfrutar con morbo tus heridas sangrantes. En tus fluidos vivos logré encontrar la nitidez de mi vida, el colorido que perdí un día por desilusionarme de mis suposiciones.
Entraste como una realidad y hoy...Con una sonrisa que no me cabe en la cara y detrás de éstas rejas me siento en armonía, y desde acá, si estuvieses vivo te invitaría un café y un cigarrillo, para compartir contigo, a quien amo.
Ésta infinita paz que me ha dado darte un principio con mis propias manos, ver como te elevabas a lo infinito y mis lágrimas apasionando mi tersa piel fue una situación inolvidable, fue una utopía infinita hasta que alguien golpeó la puerta y tuve que marcharme con el dulce sabor de mis lágrimas saladas producto de ti, de ti en otro mundo. Gracias por tu ayuda...
No hay comentarios:
Publicar un comentario